El Real Madrid afronta una visita siempre exigente a Mendizorroza para cerrar la jornada 16, en un duelo marcado por la distinta realidad de ambos equipos. El Alavés llega con necesidad de puntos tras una racha irregular, mientras que los blancos, segundos en la clasificación, buscan una victoria que les permita no perder comba en la pelea por el liderato. El choque promete intensidad y tensión competitiva, con un Real Madrid obligado a reaccionar después de resultados dispares en las últimas semanas.
El conjunto de Xabi Alonso llega a Vitoria condicionado por una oleada de bajas que afecta especialmente a la defensa. A las ausencias de larga duración como Carvajal, Militao, Alexander-Arnold o Mendy, se suman las dudas de Alaba, Camavinga y Huijsen, todos con molestias musculares que complican los planes del técnico. La situación se agrava con las sanciones que arrastra el Madrid tras el duelo ante el Celta, dejando fuera también a Endrick, Álvaro Carreras y Fran García. Un panorama que obliga a recomponer líneas y a realizar ajustes forzados.
Con este contexto, el once dependerá en gran medida de la evolución física de los jugadores tocados. Si ninguno de los defensas se recupera a tiempo, Valdepeñas, lateral del Castilla, podría debutar en un escenario de máxima responsabilidad. En el centro del campo, Güler y Ceballos se disputan un puesto para acompañar a los habituales, mientras que en ataque la gran incógnita es Mbappé, todavía entre algodones pese a haber entrado en la última convocatoria. Si el francés no llega, Gonzalo podría tener minutos, mientras que Rodrygo apunta a repetir por la derecha tras su buen rendimiento en Champions. Nuestra apuesta:

A pesar de las dificultades, el Real Madrid acude a Mendizorroza con la obligación y la convicción de salir adelante. El equipo ha demostrado en numerosas ocasiones su capacidad para competir incluso en escenarios adversos, y este partido exige precisamente ese carácter. Ganar en Vitoria no solo permitiría seguir en la pelea por el liderato, sino también reforzar la confianza del grupo en un momento marcado por lesiones, sanciones y necesidad de respuestas inmediatas.





